lunes, 8 de noviembre de 2010
Fin de semana con amigas
El fin de semana pasado fue extraordinario. Nos juntamos 6 amigas en la casa rural de María(una de mis amigas) y pasamos los dos días en plan de relax y dándonos tratamientos de estética unas a otras... fue genial. Quedamos súper relajadas y no nos costó ni la mitad que ir a uno de esos Spas en los que te dejas la piel. El sábado por la mañana me tocó limpieza de cutis con una mascarilla de chocolate "riquísima" (Dermastir) y luego, después de que Marta me la retirara dejándome el cutis completamente limpio, me dió un masaje con aceite facial hidratante (Body Shop). Me sentó tan bien que me quedé completamente dormida. Cuando me desperté me fui a duchar y nos fuimos todas al restaurant del pueblecito de al lado a comer, reír y beber. Por la tarde, continuó la sesión de limpiezas de cutis y esta vez me tocó a mi hacerle el tratamiento a Marta. Tenemos a Dolo entre nosotras que trabaja como esteticienne y nos aconseja. Mientras hago los tratamientos, Dolo me ha aplicado los parches frownies en las patas de gallo. Estos parches sirven para disminuir las arrugas de expresión. Si los usas con regularidad llegarán a sorprenderte lo efectivos que son. Una vez acabé con Marta me fui al jacuzzi donde terminamos todas riéndonos a carcajadas de las anécdotas que nos contaba Susana.
Por la noche vimos una peli ya hacia las 11 nos fuimos a cenar a otro Restaurant. Como se trataba de un fin de semana de descanso, no salimos y nos fuimos directamente a la cama para empezar temprano con la sesión de yoga que nos daría Marta. María no ha practicado yoga en su vida ni ninguna otra modalidad de gimnasia. Fue complicado mantener la concentración viéndola a ella partirse de risa con las indicaciones de Marta. Como hizo muy buen tiempo, estuvimos un rato al sol tomándonos unos zumos riquísimos que habíamos preparado antes de salir al campo (para la clase de yoga). Paseando volvimos a la casa para ducharnos e ir a comer al restaurante del día anterior. Por la tarde de regreso a casa nos prometimos repetir la experiencia al menos 2 veces al año. Eso sí que fue una cura anti-estréss y un recuerdo que tenemos juntas que no olvidaremos!!!!
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